BRISA DEL ALBA
¡Buenas nuevas, oh corazón mío!
La brisa del alba está de vuelta
y sus alas cobijan un mensaje feliz
que traen de las fronteras de Saba.
Ave matinal: di tu canto largo tiempo,
tu canto dulce como el de David,
pues la rosa, rival de Salomón,
en las alas del viento está de vuelta.
En el aliento de la mañana descubre el tulipán
un aroma de vino y en él espera hallar remedio
a las heridas de su afligido corazón.
¿Dónde encontrar el sabio que interprete
la lengua del lirio? Le preguntaría:
“¿De dónde regresa mi bienamada?”
mis ojos se llenaron de lágrimas
al ver partir la caravana
y mi llanto ha corrido hasta hoy,
cuando el oído del corazón presintió
las campanillas de los camellos
que anuncian su retorno. Dios me ha colmado,
Dios me ha dado la mayor fortuna y, sin duda,
es su misericordia quien me devuelve
mi ídolo de corazón de piedra.
Shejim: golpeaste las puertas del pecado
y quebrantaste tu promesa. Mas ya
estás perdonado,
pues hela aquí que regresa con mensaje de paz.
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